Europa aprieta el acelerador en la aprobación de los distintos paquetes de medidas climáticas y energéticas en un contexto muy delicado marcado entre otros factores por la guerra de Ucrania y sus consecuencias directas o indirectas, como la inflación, los altos precios de la energía y la inestabilidad política en algunos países miembros.
La necesidad de actuar con más urgencia y contundencia frente a la crisis climática y la energética se ha acrecentado este verano, con olas de calor inéditas y sequías en toda Europa que han secado ríos, comprometido cosechas y reducido la generación de energía hidráulica, además de provocar numerosas pérdidas humanas.
Entran en la recta final las negociaciones sobre el paquete Fit for 55, impulsadas por REPowerEU, mientras que se avanza en un nuevo diseño del mercado de la electricidad, el futuro de la gobernanza económica y se consideran diversos mecanismos para proteger a los hogares, temas que serán debatidos en el seno del CT 1 Objetivo 55 (Fit fot 55): Nueva ambición climática del CONAMA 2022, uno de los cinco comités que abordan el primer eje del programa Energía y Cambio Climático.
Recientemente los eurodiputados han votado a favor de aumentar el porcentaje de energías renovables en el consumo final de energía de la UE hasta el 45% en 2030, dentro de la revisión de la Directiva de Energías Renovables (DER), un objetivo también respaldado por la Comisión Europea dentro de su paquete REPowerEU.
Por otra parte, la Comisión Europea ha lanzado una propuesta de Reglamento sobre la Restauración de la Naturaleza (RRN), todavía en proceso de aprobación por el Parlamento y el Consejo Europeo, que supone la primera legislación de la historia que propone y pretende de manera explícita restaurar la naturaleza en el viejo continente. El objetivo concreto es reparar el 80% de los ecosistemas degradados de Europa y mejorar su condición, de manera que se asegure la provisión de bienes y servicios ambientales.