En la mesa dedicada a la restauración de ecosistemas fluviales ante la nueva Estrategia Nacional de Restauración de Ríos, Francisco Javier Sánchez Martínez, subdirector general de Protección de las Aguas y Gestión de Riesgos del MITERD, informó de que hasta mediados de diciembre se encuentra abierta la consulta pública para la elaboración de la Estrategia, con un presupuesto de 2.500 millones de euros, hasta 2030, que contempla el impacto del cambio climático y los daños que quedan tras los incendios forestales, entre otros. De estos, 1.700 millones de euros corresponden a ejecución directa de las comunidades autónomas y otros 400 millones, a ayudas a ayuntamientos y comunidades autónomas para tramos urbanos.
Por su parte, Marc García Manzana, comisario de Aguas de la Confederación Hidrográfica del Júcar, expuso una serie de problemas y situaciones concretas, entre ellas las acciones de recuperación de espacios de ribera, en la medida de lo posible, a través de soluciones basadas en la naturaleza. A su turno, Juan Lluch Peñalver, comisario adjunto de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, expresó su preocupación por el periodo de sequía que viene durando desde hace unos años (con menos influencia de la borrasca atlántica y, por tanto, menos precipitaciones), en una cuenca fundamentalmente agrícola, con predominio del olivar. Aunque, explica Lluch Peñalver, es posible proveer a las comunidades de regantes con aguas regeneradas. La erosión y la sedimentación son las dos condiciones que deben tener en cuenta a la hora de planificar las actuaciones.
Un anillo verde de 75 kilómetros
Raquel Bravo Rubio, jefa del Departamento de Difusión y Cooperación Institucional del ayuntamiento de Madrid, reseñó, por su parte, los proyectos de restauración fluvial en el río Manzanares, en aliviaderos de arroyos y en los cauces incluidos en el perímetro del Bosque Metropolitano de Madrid. En el caso de este anillo verde, cabe destacar que tendrá una longitud de 75 kilómetros, con ampliación de las áreas verdes y un millón de nuevos árboles y arbustos autóctonos. Conectará varios espacios forestales, incluso más allá de la ciudad de Madrid. La idea es impulsar la revalorización del río Manzanares como corredor ecológico.
En dicha mesa, moderada por el periodista ambiental Pedro Cáceres, Santiago Martín Barajas –de Ecologistas en Acción– también expuso acerca de la renaturalización del tramo urbano del río Manzanares, un proyecto de «enorme interés social». «Hoy hay árboles que nacieron de semillas, en 2016, que ya tienen 18 metros de altura», se congratuló Martín Barajas. A la vez, el cauce depurado del río trae peces autóctonos, aves y otras semillas, como las de los sauces y álamos que van brotando, ahora sí, con naturalidad.