Los gobiernos autónomos de Canarias, Murcia, Castilla-La Mancha y la Diputación de Barcelona han apostado este miércoles por la cooperación territorial para la adaptación al cambio climático durante el Congreso Nacional de Medio Ambiente (CONAMA 2022), celebrado en Madrid.
En la sesión La Misión Europea de Adaptación al cambio climático: una oportunidad para las regiones y comunidades, los representantes de dichos territorios han hecho especial hincapié en la necesidad de “pasar a la acción” y materializar las políticas en esta materia, en la que se ha puesto el foco durante la Conferencia por el Cambio Climático de Naciones Unidas (COP27) de Egipto.
En este sentido, el Consejero de Transición Ecológica, Lucha contra el Cambio Climático y Planificación Territorial del Gobierno de Canarias, José Antonio Valbuena Alonso, ha remarcado la vulnerabilidad de las islas, que están “situadas en la primera línea” entre los territorios más afectados por el calentamiento global. “Canarias puede ser el primer territorio de España que pierda la batalla contra el cambio climático”, ha asegurado, tras señalar que playas como La Alcalá, en Tenerife, pueden desparecer en las próximas décadas. Sobre los ámbitos en los que hay que prestar especial atención, ha apuntado a la biodiversidad y a las costas por la “riqueza ambiental” que albergan y por ser fuente de recursos económicos para la isla; así como por la transición energética y la educación ambiental.
El Consejero de Agua, Agricultura, Ganadería, Pesca, Medio Ambiente y Emergencias del Gobierno de la Región de Murcia, Antonio Luengo Zapata, por su parte, ha instado a “aprovechar la oportunidad” y “trabajar junto a las comunidades vecinas para contribuir a la adaptación al cambio climático”. “Hay que dar una respuesta de manera contundente y tangible”, ha dicho y ha añadido que, en La Región, se está trabajando en la absorción de los gases de efecto invernadero a través de silvicultura y la adaptación de sectores importantes para la comunidad murciana como la agricultura. Además, ha apuntado como uno de los retos “implicar a la ciudadanía” para que pueda contribuir a una mayor sostenibilidad. “Estamos trabajando en materia de formación y sensibilización”, ha detallado.
Sobre las acciones en Barcelona, el Presidente delegado del Área de Acción Climática de la Diputación de Barcelona, Xesco Gomar, ha destacado los proyectos en materia de adaptación que están llevando a cabo en el territorio y ha apuntado a la resiliencia, la movilidad y los residuos como los sectores prioritarios en los que hay que seguir trabajando. “Es imprescindible que los cambios los hagamos acompañados por los ciudadanos”, ha dicho en la sesión. También ha hecho referencia al importante aumento de presupuesto en este ámbito en comparación a los años anteriores y ha hecho un llamamiento a apostar por la economía verde. “La economía será verde o no será”, ha incidido.
La comunidad castellanomanchega es otra de las que está realizando avances en materia de adaptación y transición energética, según ha explicado el Viceconsejero de Desarrollo Sostenible de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, Fernando Marchán Morales, que ha situado este territorio “a la cabeza a nivel nacional en la transformación energética”, con un mix energético de más del 80% de renovables. Sin embargo, ha apuntado a que queda trabajo por hacer, ya que “la transición energética tiene que ser justa y equitativa sin dejar a nadie atrás”.
La jornada ha contado, además, con la intervención de la directora de Programas de la Unión Europea y Cooperación Territorial del Centro para el Desarrollo Tecnológico y la Innovación (CDTI), Lydia González, que ha animado a unir esfuerzos entre regiones para la adaptación y “apoyar a aquellas que aún no han identificado los riesgos a hacerlo y desarrollar planes específicos para su territorio”.
El diálogo entre los alcaldes ha estado precedido por la intervención de la directora de la Fundación Conama, Alicia Torrego, que ha puesto en valor el papel de las regiones como “una escala intermedia importante” tanto por la configuración de las competencias como por la relación que existe con el territorio y la dinámica de interacción.