Los fenómenos extremos del cambio climático enmarcan las nuevas políticas del agua en España

La planificación hidrológica es un tema de primer orden en cualquier lugar del planeta y en el que hay que poner especial énfasis en climas mediterráneos como el de la Península Ibérica. De ahí que, a partir del consenso de que las políticas del agua en España necesitan un nuevo impulso, el comité técnico de políticas y planificación en materia de agua de CONAMA propusiera a Teodoro Estrela Monreal, director general del Agua del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITERD) que presentase en el Congreso las novedades legislativas en materia de agua y las perspectivas que se abren en el escenario que anuncia el cambio climático.

Así, en la apertura de la última jornada de CONAMA, Teodoro Estrela ha delineado el panorama del territorio español, con un régimen hidrológico muy irregular, marcado por frágiles equilibrios entre recursos y demandas, algo que, ha dicho, puede agravarse con el calentamiento global. Por ello, el director del Agua ha señalado que las políticas de agua tienen que tener como marco irreductible la adaptación al cambio climático.

En este sentido, y de acuerdo con lo establecido por la ley 7/2021 de Cambio Climático y Transición Energética, en julio de 2022, se ha trazado una Estrategia con instrumentos acordes a los principios de esa ley para los Planes hidrológicos de cuenca y de gestión de riesgos de inundación; en ambos casos, según ha anunciado Estrela, “se espera que se aprueben antes de fin de este año”. Asimismo, y específicamente en las cuencas del Guadiana y del Guadalquivir se trabaja en los planes para afrontar las sequías.

Por lo demás, según la enumeración de Estrela, se están planteando una Estrategia de restauración de ríos y el Plan de Acción sobre aguas subterráneas, que se suman a la puesta en marcha de los procesos de digitalización (PERTE) para la transparencia y el conocimiento de los usos del agua. En todos los casos, esto podría ayudar a España a prevenir sanciones y resolver los procedimientos de infracción abiertos por la Unión Europea.

Punto por punto, inversión a inversión

En cuanto a los Planes hidrológicos de cuenca, el director del Agua ha recordado que ya están listos y que se presentarán al Consejo del Agua durante la próxima semana, la última de noviembre. El foco de estos planes está puesto en lo ambiental y en la prevención de los fenómenos del cambio climático para obtener seguridad hídrica, recuperar acuíferos, y mantener en buen estado las infraestructuras del patrimonio hidráulico. La inversión total en Planes hidrológicos intercomuntarios, en el periodo 2022-2027, será de 21.000 millones de euros, de los cuales, la Administración central aportará 8.000 millones.

Estrela ha señalado, asimismo, que los Planes de Gestión del riesgo de inundación, que incluyen una detallada cartografía de la peligrosidad, que permite profundizar el conocimiento de la misma, también introducen soluciones basadas en la naturaleza y soluciones mixtas. Al mismo tiempo, los Planes especiales de Sequía (que significan una revisión de los planes especiales de 2018) se integran en el contexto de la planificación hidrológica para minimizar los impactos ambientales, económicos y sociales.

En cuanto a la Estrategia Nacional de Restauración de Ríos, tanto en lo que concierne a las obras en las cuencas como en los tramos en que los cauces fluviales pasan por las ciudades, se plantea a largo plazo, esto es, hasta 2030, con algo más de 2.000 millones de euros de inversión. Se estima que se actuará sobre unos 3.000 kilómetros de ríos. Con esta nueva Estrategia se actualizan anteriores planes, gracias a un conocimiento mucho más avanzado en indicadores hidromorfológicos.

En lo que se refiere a las aguas subterráneas, ya se prepara un Plan de Acción que ataje la sobreexplotación, las elevadas concentraciones de nitratos (ya se cuenta con un Real Decreto que transpone la Directiva europea sobre polución por nitratos) y la contaminación por plaguicidas. El Plan de Acción pone el énfasis en actualizar el conocimiento y actuar sobre mal estado químico y cuantitativo de las masas de agua, también sobre las redes de control y en la mejora de la gobernanza, para que en la gestión se involucren las comunidades de usuarios.

Finalmente, entre los cambios en la Ley de Aguas, Estrela ha explicado que introduce normas reguladoras de trasvases y modificaciones en el asunto de los aprovechamientos y control de caudales concedidos, así como en el concepto de obra hidráulica. Además, ha previsto la instalación de plantas fotovoltaicas flotantes en embalses y fija un canon para la utilización de aguas continentales para la producción de energía eléctrica, con más seguridad, lo que contribuye a la estabilidad financiera de los organismos de cuenca.

La sesión dedicada a las políticas del agua en la jornada del jueves de CONAMA ha continuado con un tramo dedicado, justamente, a la reforma de la Ley de Aguas y del dominio público hidráulico y otro tramo destinado a analizar en detalle la restauración de ecosistemas fluviales ante la nueva Estrategia Nacional de Restauración de los Ríos.